Al verdadero amor no se le conoce por lo que exige, sino por lo que ofrece.
– Jacinto Benavente –
Reich define de las corazas como una tensión que se hace habitual y se instala en nuestro cuerpo. Él dice que no vivimos el cuerpo sino en una armadura. Entonces el carácter es la estructura de las corazas que nos protege ante el entorno hostil.
Cada armadura se corresponde con una personalidad, que es una forma estereotipable de actuar y reaccionar ante los estímulos del entorno con sus miedos y con certezas.
El carácter es la suma de las experiencias pasadas del sujeto, esas experiencias subsisten, se acumulan y se depositan en capas estratificadas de la coraza. La adaptación implica lidiar con el medio ambiente sin comprometer nuestro equilibrio interno; entonces cada conducta nueva, si representa una ventaja adaptativa, se conserva, sino desaparece.
Por eso nuestros cuerpos son únicos e intransferibles. Nadie vive ni reacciona como nosotros.